Templos tendrían que pagar impuestos por alquiler en caso de pasar plan fiscal
Róger Murillo / periodicomaranata.com
La reforma fiscal o Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas que se discute en la Asamblea Legislativa pretende gravar a los templos de todas las iglesias, no importa la religión que sea, con un monto del 13 por ciento sobre el alquiler de locales cuyos montos superen los 862.000 colones.
Es un Impuesto al Valor Agregado (IVA) a las organizaciones religiosas que renten instalaciones que usen como templos y cuyos montos mensuales superen el equivalente a dos salarios base.
Así se desprende del texto sustitutivo presentado el pasado jueves por el gobierno de la República a la corriente legislativa, propuesta que fue rechazada en pleno por los 14 diputados de Restauración Nacional.
Esta es la primera vez en la historia religiosa de Costa Rica que un gobierno ante su desesperación económica recurre a tocar las iglesias, olvidándose de la labor social y espiritual que han realizado durante años a favor de las comunidades, haciendo trabajos que ni siquiera el Estado hace, sobre todo en el campo del combate a los flagelos sociales y con resultados espirituales que no se logran con programas convencionales como los que suelen usar los gobiernos de turno.