Róger Murillo-periodicomaranata.com /
A solo un mes de cumplir sus 64 años de edad y con 48 de ministerio, se nos fue a la presencia de Dios, don José Ángel Salas Miranda, presidente de Santidad Pentecostal, Costa Rica.
Él ingresó este sábado de emergencia al hospital San Juan de Dios por una supuesta infección urinaria, pero pareciera que algo más se complicó y esta mañana murió, según el reporte de los médicos de la Unidad de Cuidados Intensivos de este nosocomio, sin que de momento se tenga un diagnóstico certero de la causa final de su muerte.
Don José Ángel y doña Lucía, su esposa.
Vida familiar
Don José Ángel nació el 25 de julio de 1956, muy joven había entregado su vida al Señor y ya a los 17 años comenzaba a recibir su formación ministerial en el Instituto Juan Parker.
Ahí conoció a Lucía Pérez Solano, oriunda de la zona sur, con quien años después contraería matrimonio. Con ella procreó a Michael y Stephanny.
Don José Ángel y doña Lucía, estaban por cumplir 43 años de matrimonio.
En compañía de líderes como Cristina Montes, Mauricio Madrigal, Martín Guerra, Joaquín Quesada y Marcelino Benitez, entre otros.
Estudiante ejemplar
José Ángel “era un estudiante ejemplar, lo mismo que su joven novia Lucía. Lo recuerdo como un emprendedor, entusiasta y visionario líder”, afirma su otrora profesor Rubén Córdoba Lara, quien estaba de superintendente de Santidad Pentecostal en esa época.
Como pastor, José Ángel estuvo al frente de varias comunidades, por ejemplo: San Vicente de Puriscal, Parrita de Quepos y Heredia centro.
Para el 2002 asumió la superintendencia de la organización, de lo que se infiere que de haber llegado al 2022, cumpliría 20 años como presidente.
El pastor Alex Céspedes con José Ángel Salas.
¿Cómo lo describen?
“Yo lo describiría como hombre carismático, un líder nato desde su juventud. Lleno de sencillez, con deseo de aprender siempre, pero además muy amoroso, paciente, dispuesto a escuchar a los pastores y a sus esposas. También era una persona accesible, nunca se le subieron los ‘humos’ por ocupar el máximo puesto de esta organización”, afirma don Rubén Córdoba.
Para Alex Céspedes, pastor de Santidad Pentecostal y quien laboró muy cerca de él, don José Ángel fue como un padre y amigo a la vez.
“Era un líder muy humilde, de mucha fe, visionario y reformador, que trajo cambios sólidos a nuestra organización, sin importar cuántos obstáculos encontrara en el camino. Fue un plantador de iglesias y fiel creyente en las misiones”, dijo el pastor Céspedes.
Por su parte Mauricio Madrigal, otro líder que trabajó por años cerca de don José Ángel, lo definió como un hombre de Dios genuino, con un corazón amoroso y sensible a las necesidades de otros.
“Fue un gran amigo, compasivo y sensible al dolor ajeno. Yo lo describo como un pionero de visión apostólica, que sacaba fuerzas de lo profundo de su ser para alcanzar cada meta propuesta. De sus ‘lomos’ salieron muchos líderes y siempre estaba atento para animar a jóvenes valores para que predicaran el evangelio”, manifestó el pastor Madrigal.
Jean Diego Alvarado, pastor de jóvenes de Santidad Pentecostal, lo recuerda como “padre de nuevas generaciones”.
“Él creyó en el cambio generacional y fue un fiel defensor de la generación emergente, para que asumiera el liderazgo que venían dejando los veteranos. Fue además un líder humilde. Dios lo usó para nombrar a mi esposa y a mi como pastores en Cinco Esquinas de Tibás a inicios de este año. Es el tipo de líder que invierte mucha parte de su vida en función de otros. Para mi fue como un padre”, comentó a periodicomaranata.com, Jean Diego.
La pastora doña Cristina Montes, directora de Cursum (área educativa de Santidad Pentecostal) lo describió como un mentor, maestro y amigo.
“Fue como un padre para mi, caminé con él 34 años de mi vida, tenía claras características de maestro, por eso lo describo como un mentor en mi formación ministerial. De sus ‘lomos’ salimos muchos líderes”, recalcó doña Cristina. 
Con Jean Diego Alvarado, líder de Jóvenes.
