Róger Murillo S./periodicomaranata.com /
Hoy martes fue el último día de la 48º Asamblea General de la OEA y resultó con muy buenas noticias para los defensores de los temas pro vida y familia, en virtud de que no hubo consenso en la Organización de Estados Americanos para aprobar un capítulo sobre este tema y el mismo fue excluido.
Así lo manifestó el costarricense Gerald Bogantes a periodicomaranata.com desde Washington, donde compartió la alegría de la delegación de la Alianza Evangélica Latina (AEL), al saber que primero gracias a Dios y segundo en parte a la presión ejercida por sus representantes en la OEA, se tuvo este extraordinario logro de detener este proyecto contra la familia y la vida.
Bogantes también hizo referencia a las intervenciones de los representantes de Guatemala y Paraguay, que tuvieron excelentes ponencias en contra de esta iniciativa.
¿Cuál era la propuesta?
La propuesta fue presentada en conjunto por Argentina, Brasil, Canadá, Colombia, Chile, Estados Unidos, México y Uruguay, todos en apoyo a las comunidades LGTBI.
El texto procuraba que la OEA tomara en cuenta que pese a los esfuerzos de las personas LGTBI, estas siguen siendo objeto de diversas formas de violencia y discriminación, por lo tanto, se debía tomar en cuenta la Opinión Consultiva de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) -respuesta a Costa Rica- que sostiene que la orientación sexual e identidad de género son categorías protegidas por la Convención Americana de Derechos Humanos.
De manera que la petición era que la OEA, resolviera :
-Condenar toda forma de discriminación y actos de violencia por motivos de orientación sexual, identidad o expresión de género o características sexuales.
-Instar a los estados a que continúen adoptando políticas públicas para prevenir y sancionar toda discriminación y violencia contra los LGTBI.
-Exhortar a los estados a que eliminen las barreras para la participación política de los LGTB.
-Alentar a los Estados a que recopilen datos sobre la violencia homofóbica y transfóbica con el objeto de monitorear la situación de derechos de las personas LGTBI.
-Instar a los Estados a que aseguren una protección adecuada a las personas intersex asegurando las prácticas médicas adecuadas a los estándares de derechos humanos.
-Solicitar a la CIDH y a la Secretaría General que continúen prestando particular atención a la protección y promoción de los Derechos Humanos de las personas LGTBI.
Pero además de eso, los proponentes querían que se ubicara a los LGTBI en el mismo nivel de vulnerabilidad y protección de los pueblos indígenas y de las personas en riesgo de exclusión social.
Y como si eso fuera poco, se pretendía regular el tema de la libertad de expresión, en virtud de que así se evitaría el discurso de odio y tolerancia.
