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La encuesta Percepción de la población costarricense sobre valores y prácticas religiosas, elaborada por el Instituto de Estudios Sociales en Población (IDESPO), menciona entre varios aspectos; porcentajes de las religiones en Costa Rica, la influencia de los líderes religiosos en la vida de las personas, el sostenimiento económico de los evangélicos a sus congregaciones, el porcentaje de los encuestados que dominan el tema de “guerra espiritual” y un dato interesante, la mayoría de cristianos costarricenses no hablan en lenguas, contrario a lo que pasaba en este país en las décadas de los setenta y ochenta.
El estudio de IDESPO, ente ligado a la Universidad Nacional de Costa Rica, que se realizó vía telefónica, a 1000 personas costarricenses de 18 años o más, que utilizan un servicio de telefonía celular, arroja resultados que cuentan con un nivel de confianza del 95% y un margen de error de + 3,1%.
Lo más relevante
El 97.1 de los encuestados afirman creer en Dios, el resto expresa que no, o no saben responder.
El 67.4% asegura pertenecer a alguna religión y el 32,5 dice no tener afiliación religiosa. Pero al confrontar a los que tienen religión, si realmente son activos y se congregan, entonces solo el 52% dijo que si, mientras que el 48 lo hicieron en forma negativa.
En lo que respecta a la práctica religiosa actual, un 52,5% indicó ser católico, el 27% evangélico, un 16,5% es creyente, pero no pertenece a ninguna religión específica y casi un 2.7% practica otra creencia.
En cuanto a la Influencia de los líderes religiosos en las decisiones cotidianas de la vida de las personas, las respuestas son variadas. Prácticamente, un tercio de la población indicó que estos líderes tenían mucha influencia, un tercio que poca y otro tanto similar, dijeron que ninguna.
Respecto a la percepción sobre distintos grados de acuerdo o desacuerdo de la población entrevistada, sobre diversos aspectos de la relación entre el Estado y la religión, se observa que algunas afirmaciones presentan una distribución dividida.
Por ejemplo, la premisa “La religión debe guiar la toma de decisiones de los funcionarios públicos”, obtiene un 58% de personas en desacuerdo o completamente en desacuerdo, seguidas de un 35% que expresaron estar de acuerdo o totalmente de acuerdo.
A la afirmación «Las iglesias deben participar en el debate político como parte de la sociedad», cerca de un 49% manifestó estar de acuerdo o totalmente de acuerdo; mientras que casi un 45% en desacuerdo o completamente en desacuerdo.
Sobre la premisa,“Las Iglesias y el Estado deben tener una relación separada e independiente”, cerca de un 60% indicó estar de acuerdo o totalmente de acuerdo. El resto en contra.
Para el tema de, “El Estado debe apoyar económicamente a todas las Iglesias”, un 44.4% se manifestó de acuerdo o totalmente de acuerdo, mientras que casi un 50% se posicionó en desacuerdo o totalmente en desacuerdo.
En relación al concepto, “Solo la Iglesia Católica romana debe recibir ayuda económica del Estado”, la percepción de divergencia es contundente, con 81% en desacuerdo o totalmente en desacuerdo, mientras que cerca de 14% se inclinó a favor.
En lo referente a la premisa “El Estado debe ser Laico”, aproximadamente un 53% de la población entrevistada está de acuerdo o totalmente de acuerdo, mientras que un 42% en contra.
Practicantes católicos
Posteriormente, se le consultó a la población que se declara “católica”, una serie de preguntas para conocer su perfil de participación en distintas actividades eclesiales.
Así, en primer lugar, se preguntó sobre la frecuencia con que asisten a misa; un 42% respondió “semanalmente”, un 43% “de vez en cuando”, un 10% “cuando es necesario”, mientras que un 4,3% aseguró “no hacerlo nunca”.
Un 74.5% de los evangélicos dijo conocer sobre «guerra espiritual».
Comunidad evangélica
También se le consultó a los encuestados que dicen pertenecer a una iglesia evangélica, sobre el tipo de participación que realizan en sus cultos.
Cerca de un 77% pertenece a pequeños grupos de estudio bíblico, un 53% participa en actividades de formación para ingresar a algún ministerio, casi un 50% realiza cursos de formación en consejería y un 38,6% señaló tener cierta formación teológica.
Además, un 74,5% indicó conocer que es la “guerra espiritual” y cuando se les confrontó si alguna vez había orado en lenguas, un 67% comentó que nunca lo había hecho, contra casi un 33% que acotó de manera afirmativa.
Asimismo, un objetivo de la encuesta fue conocer cómo participan las personas creyentes en sus congregaciones.
Aquí un 69% de los cristianos evangélicos, dijeron que contribuyen de manera monetaria al sostenimiento de la iglesia local. Un 43,5% que colaboran con su tiempo y un 41,5% que realizan algún tipo de trabajo voluntario.
El 22,5% agregó que pone sus bienes materiales a disposición de la comunidad o líderes religiosos y cerca del 27%, aseveró que ofrece servicios profesionales voluntarios en proyectos de la iglesia. Por último, casi un 46% se refirió a que participa en la recolección de víveres.
En cuanto a los servicios que ofrecen las iglesias cristianas cercanas a la comunidad; un 33% señaló que estas tienen comedores comunitarios, casi un 70% que ofrecen consejería familiar, un 28% atención en salud y un 13% que otorgan becas para estudiar en instituciones educativas religiosas.
