Róger Murillo-periodicomaranata.com /
Este lunes 24 de octubre en el Centro Mundial de Adoración (CMA), se celebraron los 41 años de matrimonio de los esposos Rony y Lía Chaves (Bodas de Topacio).
Fue una verdadera fiesta donde se invitó a toda la congregación, además de ministerios amigos de diversas partes del país que se unieron al aniversario.
Hubo tiempo para orar por los esposos Chaves, pero también se pasaron videos del recuerdo, se contó con una serenata y espacio para adoración, música, danza y comida.
El templo estaba repleto, pero las miradas se concentraron en la familia Chaves-Illanes, quien ahora ya ha crecido con la llegada de los nietos.
Como sabemos Rony y Lía son padres de Pavlo Josué, Ronny Andrés, Amaya Cristiana y Daniela María, quienes sirven en diferentes áreas en la obra de Dios.
Un queque bien decorado recuerda los 41 años de celebración.
Orando por una esposa
Rony Chaves Monge es uno de los ministerios costarricenses más reconocidos, no solo a nivel nacional sino en muchas partes del mundo.
Sus inicios como evangelista fueron duros, por cuanto al recorrer las zonas del interior del país, dormía en las bancas de las iglesias, recibiendo verduras o frutas como ofrendas ante la pobreza de esas regiones.
Pero Rony siempre le decía al Señor que con plátanos, guineos o bananos, sería muy difícil para él llegar a casarse y sostener un hogar, no obstante Dios le recordó que su llamamiento era del Cielo y que de ahí vendría la provisión para cuando llegara el momento.
Así fue como el 24 de octubre de 1981 contrae matrimonio con Lía Illanes, una linda chilena que había conocido en una reunión y que por su forma de ser ganó el corazón del joven evangelista.
Ella casualmente fue la última paciente de Rony como odontólogo. Porque fue para ese tiempo en que decidió abandonar su profesión para dedicarse al ministerio a tiempo completo.
La iglesia levanta sus manos para orar por sus pastores.
“Tenía que escoger bien”
El tema del matrimonio, era algo que desde la juventud Rony lo tomó muy en serio y cuando vino el llamado, la responsabilidad fue mayor.
“Uno de mis grandes temores como un joven predicador soltero, fue con quién me casaría. La mujer con la que yo hiciera un pacto matrimonial debía ser una verdadera ayuda idónea, no un estorbo al propósito de Dios en mi vida. No se trataba de un asunto de belleza sino del corazón que tuviera, de ahí que tuve que orar y ayunar en varias ocasiones, porque una mala decisión se traería abajo el ministerio que Dios me había entregado”, recuerda Rony.
Momentos de soplar las velas de los 41 años.
Posando para la foto después de la celebración.
Excelente decisión
Pero al final el Señor le dio un gran premio al encontrar una mujer maravillosa, que comprendió la responsabilidad del ministerio, criando a sus hijos con ahínco y dedicación, de manera que una vez que este proceso terminó, se dio a la tarea de disfrutar del ministerio de su esposo acompañándolo a muchos de sus viajes al extranjero.
«Definitivamente Dios me dio su favor al traerme a Lía a mi lado, ella ha sido una maravillosa novia y una gran esposa a la vez. Por eso yo digo que el ministerio de Avance Misionero Mundial (AMM) y del Centro Mundial de Adoración (CMA), los levantamos los dos, por cuanto yo soy el rostro visible pero ella el poder y fuerza motora que no se ve. Juntos hemos hecho equipo», dice el apóstol Chaves.
Doña Lía Illanes Nieto, es licenciada en nutrición de la Universidad de Chile y adquirió su nacionalidad al casarse con un costarricense.
Junto con su hermana Paulina Illanes, fue parte del grupo que fundó la Escuela de Nutrición de la Universidad de Costa Rica.
Ella laboró durante 18 años en el hospital Nacional de Geriatría y Gerontología Raúl Blanco Cervantes, pero en el año 1997 Rony le pidió que se dedicara a la parte administrativa de los ministerios y de la iglesia local, por lo tanto abandonó sus servicios profesionales en la salud.
En el campo bíblico, cuenta con un doctorado en Teología y Ministerio Pastoral, que le otorgó la Universidad Latina de Teología con sede en California.
El apóstol Rony y doña Lía, durante el culto de acción de gracias.
Unidos en medio de las pruebas
Para Rony, una de las grandes virtudes de tener una compañera como Lía en el ministerio, es la forma en que ella se ha solidarizado en los momentos difíciles.
Durante su larga carrera, este apóstol ha pasado situaciones muy complejas y dolorosas, pero en medio de todas esas tormentas, doña Lía siempre le dio el apoyo, oraron juntos y Dios les dio la victoria.
«En los momentos más difíciles y en los tiempos de decisiones cruciales, el estar unidos nos ha dado la victoria y el avance en Cristo Jesús. Sin duda alguna para mí, el análisis, consejo y balance que Lía le ha dado a todo lo que por más de 40 años hemos hecho y edificado, han sido factores fundamentales para nuestro éxito y victoria en el ministerio y en la familia», afirma nuestro entrevistado.
Ronny Junior en representación de la familia, ora por sus padres.
El que halla esposa, encuentra un tesoro
El libro de Proverbios dice: «El que halla esposa halla el bien y alcanza la benevolencia de Jehová».
Y otra traducción afirma: «El hombre que halla esposa encuentra un tesoro y recibe el favor del Señor».
Así describe el apóstol Rony, la bendición que Dios le ha dado al haberle dado a doña Lía durante estas cuatro décadas.
«Yo encontré un tesoro invaluable y eso se lo debo a mi Señor, que fue el que nos unió», acota Rony.
Y agrega un versículo bíblico al cual hace referencia con mucha regularidad :
«Por tanto, al Rey de los siglos, inmortal, invisible, al único y sabio Dios, sea honor y gloria por los siglos de los siglos. Amén «. (1 Timoteo 1:17).