Formación

Leña para el fuego (Entrega 39)

Apóstol Rony Chaves /

Dios puede usar a cualquier gobernante para que se cumplan sus diseños y sus propósitos divinos 

Texto bíblico en estudio: Lucas 2:1-7

 » Aconteció en aquellos días, que se promulgó un edicto de parte de Augusto César, que todo el mundo fuese empadronado.

  Este primer censo se hizo siendo Cirenio gobernador de Siria.

  E iban todos para ser empadronados, cada uno a su ciudad.

  Y José subió de Galilea, de la ciudad de Nazaret, a Judea, a la ciudad de David, que se llama Belén, por cuanto era de la casa y familia de David;para ser empadronado con María su mujer, desposada con él, la cual estaba encinta.

  Y aconteció que estando ellos allí, se cumplieron los días de su alumbramiento.

  Y dio a luz a su hijo primogénito, y lo envolvió en pañales, y lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el mesón «.

I – Motivación 

Dios tiene en sus manos el control de todos los gobernantes del planeta y Él puede utilizar a cualquiera para cumplir sus designios y sus propósitos en la tierra.

II – Los gobernantes importantes tienen las decisiones en sus manos para gobernar 

-La autoridad y el poder concentrada en los gobernantes antiguos era bien notorio. Ellos decidían con absoluto dominio de las gentes, como se hacían las cosas en sus reinos e imperios. 

-En el caso de los censos poblacionales, los romanos los hacían a su manera por años de años. Ellos se sabían a la gente donde vivían en el momento del censo. Las gentes se quedaban en el lugar o ciudad donde vivían, ellos no se movían de allí.

Lo usual, lo esperable, hubiese sido que en los días del nacimiento de Jesús cualquier censo bajo dominio romano se hiciese a la usanza romana. Mas no fue así.

-Los judíos cuando hacían sus censos lo hacían diferente a los romanos, ellos movían a sus gentes desde las ciudades donde vivían hacia el lugar del origen de sus padres o ancestros principales.

Bajo dominio romano lo lógico es que un censo no se hiciera a la usanza judía sino a la del imperio.

-En el censo en los días del nacimiento de Jesús, contra todos los pronósticos, los romanos decidieron hacerlo a la manera en que lo hacían los judíos.

  » Aconteció en aquellos días, que se promulgó un edicto de parte de Augusto César, que todo el mundo fuese empadronado.

  Este primer censo se hizo siendo Cirenio gobernador de Siria.

  E iban todos para ser empadronados, cada uno a su ciudad.

  Y José subió de Galilea, de la ciudad de Nazaret, a Judea, a la ciudad de David, que se llama Belén, por cuanto era de la casa y familia de David». (Versículos 1-4 ).

III-Dios movió al César romano para que el censo se hiciera a la usanza judía 

-Dios influyó en el emperador del Imperio romano, el más grande del mundo conocido, porque Él tiene el poder para hacer que los gobernantes se ajusten a sus palabras proféticas declaradas por sus profetas en la antigüedad.

-Augusto César, emperador romano, extendió un edicto para que el censo se hiciera en un tiempo específico y en las ciudades específicas de dónde procedían sus ancestros principales.

Esto fue inusual, pero sobre todo milagroso, pues María la madre de Jesús estaba encinta en esos días y debía dar a luz en medio del censo.

Desde luego que el niño nacería en la ciudad donde tendrían que estar para ser casados, esta sería Belén por cuanto José su marido era descendiente del Rey David de Belén de Judá.

-Esto fue milagroso porque él Mesías de Dios, según el profeta Miqueas, debía nacer en Belén.

Si los Romanos hubiesen hecho el censo a la manera romana, el hijo de María y de José, hubiese nacido en Nazareth y la profecía no se habría cumplido.

⁃  » Pero tú, Belén Efrata, pequeña para estar entre las familias de Judá, de ti me saldrá el que será Señor en Israel; y sus salidas son desde el principio, desde los días de la eternidad «. Miqueas 5:2

-Solo Dios podía hacer que Roma se alineara a sus Palabra, este es el gran milagro del Altísimo. Alabado sea Dios.

-Dios puede usar a cualquier gobernante para que se cumplan sus diseños y sus propósitos divinos. 

IV-Moraleja para todos 

Nada hay imposible para Dios, Cielo y tierra pasarán, pero su bendita Palabra no pasará, esta se cumplirá.

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