Masiva asistencia en Concentración de la Familia
Róger Murillo /periodicomaranata.com :
Miles de personas se dieron cita en la mañana de este sábado 22 de julio en la Plaza de la Democracia, en San José, Costa Rica, para atender el llamado de la Federación Alianza Evangélica Costarricense (FAEC) a una “Concentración por la Familia Costarricense”.
Durante la actividad, después de cantar el Himno Nacional y la Patriótica Costarricense, se escuchó las reflexiones de varios oradores, cuyo objetivo fue buscar una toma de conciencia en la comunidad cristiana con los temas de familia, matrimonio y educación de los hijos , todos ligados a una ideología internacional de organizaciones que en los últimos años han venido presionando a los gobiernos y legisladores de nuestros países para que aprueben leyes, cuyos contenidos y propósitos riñen con los preceptos bíblicos plasmados en las Sagradas Escrituras.
Como primer orador estuvo el profesor universitario Luis González, de creencia católica, quien ha venido estudiando esta temática a través de los años. Por eso fue llamado por la FAEC a tener unas reflexiones en esta actividad.
“El aborto y la eutanasia por ejemplo son formas de exterminio industrial del ser humano, por cuanto están ligadas a clínicas abortivas, por lo tanto, son mecanismos de carácter comercial e industrial para matar seres humanos”, afirmó este académico.
Y agregó -entre otros aspectos- “normalizar la muerte con fines demográficos mediante leyes, manuales y decretos como un derecho humano, es utilizar la clásica maniobra marxista del lenguaje, los medios y la reproducción, donde la lucha de clases es aplicada a la persona humana y a sus dimensiones básicas, poniendo a la pareja matrimonial en contra, así como los hijos contras los padres y viceversa, afectando el matrimonio y la familia, elementos fundamentales de una sociedad.”
Afirmó además que a la postre es una búsqueda de poder, aunque se vista frondosamente de derechos humanos. También se refirió a la fecundación in vitro, lo cual definió como el Estado interviniendo en la fase inicial de la reproducción humana.
Expresó, que ahora aparece la diversidad afectiva sexual (Guías sexuales), donde transforman la diversidad humana, genética, religiosa y cultural en una diversidad basada en categorías sexuales, donde no se quiere respetar el sexo biológico asignado a la persona en el momento de la concepción.
Comentó, que la ideología de género no es una verdad sustentable, ni sostenible con argumento científico ya que toda verdad que no busque equidad entre mujer y hombre, sin duda lo que hará es buscar destruirlos a ambos.
“La peor violencia contra la mujer es no poder decirle mujer. Entonces de que les valió haber emprendido tantas luchas sociales para defender los derechos de la mujer, si ahora no se le puede decir mujer. A la vez debemos decir, que la peor homofobia es decirle al hombre que ya no es varón. Entonces ellos son los homofóbicos, no nosotros, porque la ideología de género busca el recurso del odio y es intolerante contra todo aquel que se oponga… esta ideología es sin duda una amenaza contra la libertad”, argumentó Luis González.
No somos ignorantes
Para la sicóloga Kattia Fernández – una de las expositoras de este sábado en esta concentración- tanto el gobierno de turno como algunos medios de comunicación, han dicho que los cristianos somos ignorantes porque nos oponemos a la educación sexual, “pero nada más lejos de la realidad”, dijo esta profesional.
“Lo que ocurre es que queremos que a las familias se nos permita educar a nuestros hijos con nuestra identidad de cristianos y que seamos un grupo de apoyo en ese proceso educativo, porque no queremos la influencia de imposiciones internacionales. No nos oponemos a esta formación, solo pedimos que se haga con base en valores y principios cristianos como siempre ha sido en la cultura costarricense, donde los padres de familia eran protagonistas, ahora el Estado quiere asumir ese papel”, expresó la conferencista.
Dijo además, que nos dicen ignorantes porque nos oponernos a este adoctrinamiento, pero no es para menos, por cuanto del 2011 al 2017 la política de educación para la afectividad y sexualidad del Ministerio de Educación de Costa Rica (MEP), dio un giro radical, teniendo como común denominador el tema del placer, eliminando la palabra padre y madre cambiándola por familias y comunidades, no aparece el término iglesia e intentan enseñarles a los niños hasta las zonas erógenas en edades donde ellos no están aptos para comprender esos temas, entre otros aspectos.
Denunció las connotaciones en los mensajes a los estudiantes para que ellos escojan su sexo, irrespetando su designación biológica. De manera que se les enseñará a partir del 2018 que si un niño para disfrutar su sexualidad quiere ser mujer en el futuro, puede hacerlo sin reparo alguno, concepto que según la sicóloga producirá muchos conflictos emocionales.
“Que usted le diga a un niño que puede disfrutar de la sexualidad y que el género es cambiante, sin duda será algo confuso para él. Imagínese lo que es decirle a un niño que, puede sentirse varón por ahora, aunque más adelante puede cambiar a niña. Pero no solamente eso, hay que tomar en cuenta que quien se lo dirá será la maestra y para los pequeños lo que digan ellas son como santa palabra. Los chicos llegarán a la casa diciendo que la niña lo dijo y ese nos producirá conflictos con los valores que por años les hemos enseñando, por eso no podemos permitir que el Estado eduque a nuestros hijos, porque los quiere adoctrinar con valores externos que además son antibíblicos”, argumentó esta sicóloga.
Estamos callados
Por su parte el pastor Marco Vega en una breve reflexión, advirtió a los asistentes a esta concentración que la Iglesia no puede estar más callada, “porque estamos perdiendo terreno, es como si estuviéramos en modo mute y eso no puede ser”, acotó.
A la vez hizo un llamado a utilizar las redes sociales para decir lo que pensamos, sin necesidad de estar discutiendo con otros, que piensan diferente. “Los principios del reino no son negociables, usemos las redes sociales para levantar la bandera de Cristo Jesús. Hagamos ahora lo que debimos haber hecho hace mucho tiempo” recalcó Vega.
La transformación la tenemos nosotros
Por su parte el reconocido conferencista Sixto Porras, afirmó que Costa Rica está viviendo un tiempo histórico, donde estamos construyendo el futuro de nuestros hijos, los nietos y de aquellos que están por nacer.
“La transformación de un país no está en la Asamblea Legislativa, está en nuestra propia familia, o sea la tenemos nosotros mismos cuando educamos a nuestros hijos. Pero también cuando tomamos la mano de nuestra esposa y la podemos ver de frente con una alta ética, por eso debemos influenciar a nuestro propio hogar y pedir perdón si hemos cometido errores en el seno de nuestra familia, esto incluye si decepcionamos a nuestros padres”, afirmó Porras.
Dijo además que los grandes cambios sociales no han nacido en las masas “surgen en nuestros hogares, cuando nuestros hijos aprenden a soñar los sueños que inspiran a sus padres”, argumentó.
“Hagámosle entender a nuestros hijos que este país les pertenece, que ellos entiendan que deben ser capaces de dirigir los destinos de esta nación, que deben ser los mejores trabajadores, esposos, padres de familia… por eso ruego a Dios que nos dé sabiduría para influenciar el entorno en que nos movemos”, dijo Sixto.
Este orador internacional, director de Enfoque a la familia Costa Rica, animó a los padres de familia, para que eduque a sus hijos y no permitir al Estado hacerlo, esto incluye el área sexual, donde los gobiernos se están involucrando queriendo enseñarles una sexualidad con connotaciones peligrosas que llevarán mucho mal a las familias.
Enfrentando la ideología
El orador de fondo, el conferencista Alberto Mottesi, quien vino a Costa Rica invitado por la Federación Alianza Evangélica (FAEC) para participar en esta y otras actividades, enfatizó que las iglesias latinoamericanas deben enfrentar estas fuerzas ideológicas con toda valentía.
Don Alberto insistió en que hay que defender la familia, al margen de lo que cueste, sin importar quien se oponga, porque este tema es un asunto de defensa de valores, aseveró.
“La Iglesia ha sido pasiva y muy congregacional, pero desde esta mañana debe convertirse en un ejército combativo en el nombre del Señor. Hemos llenado templos y eso es bueno, pero debemos de comenzar a salir a las calles, entrar a la esfera política y conquistar en el nombre de Jesús. Por eso les digo que yo veo aquí futuros diputados, alcaldes, quizá un futuro presidente de esta nación y jueces, que deben gobernar, legislar y juzgar, con la constitución en la mano, pero con la Biblia en la mente y en el corazón”, expresó.
Insistió que, pese a las presiones internacionales para cambiar leyes en cada país, la Iglesia de Costa Rica debe enfrentarse primero espiritualmente a estas fuerzas del infierno y luego pelear la batalla en todas las instancias posibles para que estas leyes no pasen.