R贸ger Murillo-periodicomaranata.com/
Aproximadamente 32 pastores han fallecido entre los meses de mayo y junio por causa del COVID-19. As铆 lo confirmaron varios contactos en Nicaragua, cuyas fuentes no se pueden revelar para evitar eventuales represalias.
El asunto es que en este pa铆s no han cesado las labores gubernamentales, deportivas, culturales, de comercio e industria, ni actividades religiosas. Todo sigue normal.
Esto ha provocado que el tema de los cultos, mantenga dividida a la Iglesia evang茅lica de los vecinos del norte, por cuanto hay l铆deres que son del pensamiento que las congregaciones deben de mantenerse abiertas y otros apoyan la tesis de cierre total, sin que el gobierno de Daniel Ortega tome posici贸n al respecto.
Parte de los que se inclinan porque las congregaciones est茅n abiertas, piensan que lo pueden hacer manteniendo el protocolo que sugiere la Organizaci贸n Mundial de la Salud (OMS), guardando la distancia, evitando saludos, cuidando el protocolo de tos y estornudo, e incluso usando mascarilla.
Lo que si es real, es que las iglesias que mantienen abiertas sus puertas, han percibido una disminuci贸n en la asistencia, ya que la mayor铆a de la gente tiene miedo al contagio.
Para algunos analistas, los pastores pro gobierno optan por mantener sus congregaciones abiertas, para quedarle bien al r茅gimen y los que no apoyan a los sandinistas, decidieron cerrar, no solo por precauci贸n, sino tambi茅n para llevar la contraria y mostrar su descontento.
Entre la fe y precauci贸n
El sector que ha decidido seguir con los cultos, dicen que a los que cierran les falta fe, por cuanto Dios es el que los proteje y les da el manto de cobertura.
Pero los del otro bando, afirman que m谩s bien las iglesias deben tener protocolos m谩s estrictos que los de la OMS, ya que se trata de vidas humanas y eso no tiene precio.
La Iglesia Cat贸lica por su parte, ha cancelado todas sus actividades desde el pasado mes de marzo y organizaciones como la Convenci贸n Bautista, decidieron cerrar sus iglesias desde junio, algo que para muchos ya es demasiado tarde.
Pero la situaci贸n en Nicaragua sigue complicada, por cuanto no se sabe cu谩ntos son las cifras de muertes por esta pandemia, ya que a cada persona que fallece se les atribuye diversas causas, ajenas al tema del COVID-19, aunque para muchos, la gente se est谩 muriendo por causa de este virus.
