* Por Jennifer Bilek/ Tribuna Actuall/
La agenda de derechos LGBT — note la adición de “T”- se ha convertido en una fuerza poderosa y agresiva en la sociedad estadounidense. Aunque los activistas presentan el movimiento LGBT como un grupo débil e impotente que sufre opresión y discriminación, en verdad ejerce un enorme poder e influencia.
No hace mucho tiempo, el movimiento por los derechos de los homosexuales era un pequeño grupo de personas que luchaban por seguir sus disposiciones dentro de una cultura heterosexual más amplia.
Los gays y las lesbianas eran desvalidos, ampliamente superados en número y poco organizados, a veces sujetos a discriminación y abuso. Su historia fue trágica, su sufrimiento dramatizado por el SIDA y Rock Hudson, Brokeback Mountain y Matthew Shepard. Sin embargo, el movimiento de hoy no se parece en nada a esa banda de marginados perseguidos.
Sus defensores se encuentran en la cima de los medios, la academia, las profesiones y, lo más importante, las grandes empresas y la gran filantropía.
Considere el siguiente caso. Jon Stryker es el nieto de Homer Stryker, un cirujano ortopédico que fundó la Corporación Stryker. Con sede en Kalamazoo, Michigan, la Corporación Stryker vendió $ 13.6 mil millones en suministros quirúrgicos y software en 2018.
Jon, heredero de la fortuna, es gay. En 2000 creó la Fundación Arcus, una organización sin fines de lucro que sirve a la comunidad LGBT, debido a su propia experiencia como homosexual.
Arcus ha otorgado más de $ 58.4 millones a programas y organizaciones que realizan trabajo relacionado con LGBT solo entre 2007 y 2010, convirtiéndolo en uno de los mayores financiadores LGBT del mundo.
Stryker le dio más de $ 30 millones al propio Arcus en ese período de tres años, a través de sus acciones en Stryker Medical Corporation. Fundó Arcus justo cuando la epidemia de SIDA estaba bajo control en los Estados Unidos.
Antes de comenzar Arcus, era presidente de Depot Landmark LLC, una empresa de desarrollo especializada en la rehabilitación de edificios históricos. Esto le serviría bien cuando más tarde renovara el espacio para Arcus en Kalamazoo.
También fue miembro fundador de la junta directiva de Greenleaf Trust, una empresa privada de gestión de patrimonios también en Kalamazoo. La hermana de Jon, Ronda Stryker, está casada con William Johnston, presidente de Greenleaf Trust .
Además es vicepresidenta de Spelman College, donde Arcus recientemente otorgó una subvención de $ 2 millones en nombre de la feminista lesbiana Audre Lorde. El dinero se destina a un programa de estudios queer.
Los estudios queer o estudios cuir, es la teoría crítica basada en el estudio de temas relacionados con la orientación sexual y la identidad de género, usualmente enfocándose en las personas y culturas lésbicas, gais, bisexuales, transgéneras e intersexuales (LGBTI)
Ronda y Johnston han regalado a Spelman $ 30 millones de dólares en general, el mayor regalo de donantes vivos en sus 137 años de historia. Ella también es miembro del Kalamazoo College (donde Arcus otorgó una subvención de liderazgo de justicia social por $ 23 millones en 2012), así como miembro de la Junta de Fellows de la Escuela de Medicina de Harvard.
Pat Stryker, otra hermana de Jon, ha trabajado estrechamente con el homosexual Tim Gill . Gill opera una de las organizaciones sin fines de lucro LGBT más grandes de Estados Unidos y ha estado cerca de la familia Stryker desde que Jon creó Arcus.
En 1999, Tim Gill vendió sus participaciones a Quark, su compañía de software, y se puso a trabajar en la Fundación Gill en Colorado.
Trabajando en estrecha colaboración con Pat Stryker y otros dos filántropos adinerados, quienes juntos se hicieron conocidos como los cuatro jinetes debido a sus despiadadas estrategias políticas, se propusieron cambiar Colorado, un estado rojo, a azul. Procedieron a invertir 500 millones de dólares en pequeños grupos que abogaban por las agendas LGBT.
Gill señaló en su introducción de apertura para Jon Stryker en el Premios GLSEN Respeto 2015 que, desde que se conocen, él y Jon han «planeado, caminado y esquiado juntos», al mismo tiempo que «castigan a los malvados y recompensan a los buenos».
Antes de 2015, Stryker ya había construido la infraestructura política para impulsar la ideología de identidad de género y el transgénero en todo el mundo, donando millones a entidades pequeñas y grandes.
Estos incluyeron cientos de miles de dólares para ILGA , una organización LGBT para la igualdad en Europa y Asia Central con 54 países participantes, y Transgender Europe , una voz para la comunidad trans en Europa y Asia con 43 países participantes (Transgender Europe también ha financiado a más pequeños organizaciones como TENI , Transgender Equality Network Ireland).
En 2008, Arcus fundó Arcus Operating Foundation , un brazo de la fundación que organiza conferencias, programas de liderazgo y publicaciones de investigación. En una reunión de 2008 en Bellagio, Italia, 29 líderes internacionales se comprometieron a expandir la filantropía global para apoyar los derechos LGBT.
En la reunión, junto con Stryker e Ise Bosch, fundador del Fondo Dreilinden en Alemania, estuvo Michael O’Flaherty, uno de los relatores de los Principios de Yogyakarta sobre la aplicación del derecho internacional de los derechos humanos en relación con la orientación sexual y la identidad de género (principios descrito en Indonesia en 2006).
Con los Principios de Yogyakarta , las semillas se plantaron para incorporar y unir la ideología de identidad de género a nuestras estructuras legales. O’Flaherty ha sido miembro electo del Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas desde 2004.
Fuera de la reunión de Bellagio, Arcus creó MAP , el Proyecto de Avance del Movimiento LGBT, para rastrear el complejo sistema de defensa y financiamiento que promovería la identidad de género / transgénero en la cultura.
Simultáneamente, el Grupo Básico LGBTI se formó como un grupo informal interregional de países miembros de las Naciones Unidas para representar los problemas de derechos humanos LGBTI ante los miembros del Grupo Básico de la ONU financiados por Arcus, incluyendo Outright Action International y Comisión de Derechos Humanos.
Los países miembros del Grupo Central incluyen Albania, Australia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Croacia, El Salvador, Francia, Alemania, Israel, Italia, Japón, Montenegro, México, Nueva Zelanda, Noruega, España, Reino Unido, Estados Unidos Estados, Uruguay y la Unión Europea, así como la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Estas iniciativas promueven la identidad de género y el transgénero mediante la capacitación de líderes en activismo político, liderazgo, derecho transgénero, libertad religiosa, educación y derechos civiles.
La lista de organizaciones apoyadas por Arcus que promueven la causa es desalentadora: el Instituto Victoria , el Centro para el Progreso Americano , la ACLU , el Centro de Derecho Transgénero , el Proyecto de Financiamiento de Justicia Trans, OutRight Action International , Human Rights Watch , GATE, Parlamentarios para la Acción Global (PGA), el Consejo para la Igualdad Global , la ONU, Amnistía Internacional y GLSEN. El Consejo de Educación e Información sobre Sexualidad de los EE. UU. ( SIECUS ), en asociación con Advocates for Youth, Answer, GLSEN, la Fundación de la Campaña de Derechos Humanos (HRC) y la Federación de Planificación de la Familia de América (PPFA), ha iniciado una campaña con derechos basado en el marco para informar enfoques en la remodelación de las narrativas culturales de la sexualidad y la salud reproductiva. Sesenta y una organizaciones adicionales han firmado una carta que respalda una revisión de los currículos actuales.
En 2013, Adrian Coman, un veterano de Open Society Foundations de George Soros (un impulsor de la ideología transgénero que ha comenzado iniciativas para normalizar a los niños transgénero ), fue nombrado director del programa internacional de derechos humanos de la Fundación Arcus, para impulsar la ideología de identidad de género a nivel mundial.
Anteriormente, Coman se desempeñó como director de programa de la Comisión Internacional de Derechos Humanos de Gays y Lesbianas. Y en 2015, Arcus trabajó estrechamente y financió los programas de la Fundación NoVo para el transgénero . NoVo fue fundada por Peter Buffett, hijo del multimillonario Warren Buffett.
Estos programas e iniciativas promueven la ideología de identidad de género al apoyar diversas organizaciones religiosas , asociaciones deportivas y culturales, programas de capacitación y educación del departamento de policía en escuelas primarias y secundarias ( GLSEN , cuyo fundador fue llevado a Arcus en 2012 como junta directiva, ha influido en muchos Currículos escolares K-12), y universidades e instituciones médicas, incluida la American Psychological Foundation (APF).
Los fondos de Arcus ayudan a APF (la principal organización de psicología en los Estados Unidos) a desarrollar pautas para establecer prácticas psicológicas trans-afirmativas. Esos fondos «alientan» a los psicólogos a modificar su comprensión del género, ampliando el rango de la realidad biológica para incluir identidades médicas abstractas.
Al mismo tiempo, Arcus impulsa la ideología de identidad de género y el transgénero en el mercado al alentar a las empresas a invertir en causas LGBT. Para que no lo olvidemos, Stryker es heredero de una corporación médica de $ 13,6 mil millones.
Uno solo tiene que mirar a las corporaciones que apoyan a LGBT durante el mes del orgullo este año para determinar el éxito que Arcus ha tenido en este campo.
Como lo muestra el ejemplo de la Fundación Arcus, el movimiento de derechos civiles LGB de antaño se ha transformado en un gigante implacable, uno que tiene fuertes lazos con el complejo médico industrial y los corporativos globales. El lobby farmacéutico es la entidad de lobby más grande del Congreso.
Aunque los activistas presentan el movimiento LGBT como un grupo débil e impotente que sufre opresión y discriminación, en verdad ejerce un enorme poder e influencia, un poder que utiliza cada vez más para rehacer nuestras leyes, escuelas y sociedad.
